Es domingo por la mañana. Estás haciendo el desayuno para toda tu pandilla. Todo el mundo pide huevos al sol. ¿Los cocinas en tandas? ¿Usas varias cacerolas? No. Esto es lo que haces: cocinas una docena de huevos cocidos al sol en una sartén bien engrasada. Todos los huevos se hacen al mismo tiempo con la misma yema perfectamente exprimida. También puedes usar este método para preparar un lote de huevos para hacer sándwiches de desayuno. Sólo hay que dejar los huevos en el horno un poco más de tiempo, hasta que las yemas se cuajen. Aquí está el resumen. En cuanto al equipo, no es necesario usar una nueva bandeja perfecta. Con suficiente aceite, cualquier sartén servirá, aunque lo mejor es que no se pegue. Hablando de aceite, la cantidad necesaria puede parecer mucho, pero es lo que se necesita para evitar que los huevos se peguen. No querrás estar desesperadamente raspando los huevos pegados, ya que todos los demás te miran con rabia. De hecho, si tu bandeja de comida es vieja, rayada o golpeada de alguna manera, no tengas miedo de usar aceite extra. Los huevos no absorben realmente el aceite, más de lo que lo hacen al freírlos. En resumen, no se preocupe demasiado por los huevos grasientos. Preocúpate por los huevos pegados, y engrásalos en consecuencia. Mientras tu sartén aceitada se calienta, rompe los huevos en la jarra. Intenta no romper las yemas, que a veces pueden engancharse en los bordes dentados de la cáscara al caer. Mira a ver si puedes conseguir una rotura limpia. Cuando viertas los huevos en la sartén, intenta espaciar las yemas en cuatro filas de tres, pero no te preocupes demasiado. Moverse a un ritmo rápido es la prioridad. Cuando los huevos entren en el horno, no pongas un temporizador y te vayas. Vigila los huevos mientras se cocinan. Los huevos se cocinan muy rápido, así que pequeñas variaciones en los hornos y las bandejas pueden significar la diferencia entre huevos perfectos y demasiado cocidos. Presta atención y usa tu intuición y tus huevos ideales te encontrarán. Puede que estés tan emocionado que te olvides de la sal y la pimienta… ¡no! 60 recetas de huevos para el desayuno para empezar bien el día